¡Hasta quemar la última neurona! no nos queda otra.

El enemigo invisible avanza veloz entre nosotros. Todos sospechamos que ya llegó a casa y que no podremos darnos cuenta hasta que sintamos los estragos.

El egoísmo juega contra los propios egoístas. Algunos no se dan cuenta que nadie está salvo. Incluso los sobrevivientes quedan con secuelas que les acortará la vida. Mientras a más personas les llegue este virus, más será el peligro para todos y cada uno de las personas de la Tierra.

La civilización debe organizarse para enfrentar éste y todos los virus que ya están surgiendo en alguna parte del mundo. Y ello se logra con investigación en ciencia y tecnología, en colaboración internacional, en una verdadera red neuronal.

Los valores culturales y sociales tendrán que cambiar para no vivir estos momentos atroces, jamás experimentados en la historia del Perú.

El Estado tiene que ser otro. Este de poco nos ha servido. Ahora que las escenas de pobreza para muchos desconocidas han sido presentadas en toda su crudeza, ¿a alguien le queda duda que debe construirse otro, totalmente diferente, en el que el conocimiento sea el pilar fundamental?

Esta guerra no se gana con cartuchos, ni con misiles inteligentes. Se gana con neuronas. Parafraseando a un histórico soldado, podemos decir: lucharemos hasta quemar la última neurona.

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s