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Beatriz Merino contó en televisión su experiencia cuando consiguió empleo en Estados Unidos. Era 1979. «El gerente norteamericano que se sentó frente a mí, después de que me había hecho la oferta y yo le había aceptado, me dijo esta frase: ‘Si usted fuera negra, sería perfecta’. Yo me quedé absolutamente asombrada de la frase. No entendí. ¿Por qué la dijo? Porque, en el momento en el que él estaba firmando, ya había llenado dos cuotas: yo era mujer y era hispana».
La igualdad de oportunidades en educación, empleo, promoción, beneficios y distribución de recursos, y otras áreas, independientemente de su edad, raza, sexo, religión, asociación política, origen étnico o cualquier otro, optimizan el funcionamiento de cualquier organización humana.
En Estados Unidos se ha logrado mucho al respecto. El Perú recién empieza a tocar el tema, pero solo considerando el sexo.
Es tiempo que se aborde la igualdad de oportunidades independientemente del origen étnico en todos los ámbitos del empleo en el Perú. De lo contrario reinará la ineficiencia que observamos todos los días.